La mejor puta compra de mi vida

Esta historia fue un borrador para el Halloween del año pasado que lamentablemente no termine. Quise retomarlo para esta fecha pero creo que la historia tomo otro camino muy alejado de Halloween. Aun asi espero que les huste :9

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Antonio es un chico de 25 años. Desde siempre fue fanático de los súper héroes, siempre soño con ser como ellos desde que era pequeño. Pero a pesar de que conocía y admiraba a los súpers tenia una extrala obsesión por Black cat. 

Su fascinación por la heroína era tan fuerte que llegó a coleccionar cada figura de acción, cómic y pieza de mercancía que podía encontrar relacionada con la anti-heroína Felicia Hardy. Admirava su agilidad, su confianza y, por supuesto, aquellas orejas felinas seductoras. 

Un día, mientras navega por Internet, tropezó con un sitio web misterioso que prometía vender "Body suits" disfraces capaces de transormar tu cuerpo en tu personsje favorito por un pequeño precio.

Fascinado comenzó a imaginar despierto en todas las cosas que haría o no haría con ese body suit de Felicia. Emocionado Antonio hizo la compra.

Pasando algunas semanas el paquete llego, Antonio asombrado pero tambien desesperado abrió la enorme caja que habia llegado. Al abrirla encontró lo que parecía ser una un disfraz de goma muy mal hecho. Sin perder las esperanzas se arrancó la ropa y fue entrando en aquel traje.

Metiendo primero las extremidades inferiores para después los brazos y dejando por último la cabeza, pero antes de ponercerse la caveza, noto como su corpulento y enorme cuerpo se ajustaba a la perfección a ese pequeño traje. Ya poniendo la mascara en su rostro y subiendo la cremallera, Antonio no podía creer el cambio brusco de altura que tuvo, pasando de de medir 1.75 a tan solo 1.65. 

Mirando hacia abajo, se quedó sin aliento cuando vio el elegante traje de látex negro de Black cat cubriendo su cuerpo en lugar de su propia ropa. Confundido y aterrorizado, antonio luchó contra la tensión del traje hasta que se dio cuenta de que no era solo la piel sintética sino que pareciera ser piel real. 

Antonio admirando sus nuevas curvas donde antes eran ángulos obesos salientes de su cuerpo. Paso sus finas y delgadas manos en vueltas de los oscuros guantes del traje por sus nuevas caderas, subiendo lenta y seductoramente hasta los enormes pechos ocultos detrás de su pronunciado escote.

El corazón de Antonio se aceleró con emoción y anticipación cuando ambas manos llegaron a las par de copas de su busto. La sensación de estar en una forma femenina tan perfecta era abrumadoramente excitante.  Se tomó un momento para arrancarse aquel traje solo para admirarse en el espejo, tomando nota de cada curva y contorno que conformaba esta increíble figura.  Sus manos recorrieron suavemente la blanca y suave piel de sus nuevos senos antes de llegar entre sus piernas, donde descubrió otra agradable sorpresa: ¡ahora poseía la parte más íntima de una mujer!

Lleno de nueva confianza y excitación, Antonio saltó a la cama donde sintió que su anhelo se intensificaba; después de todos estos años fantaseando con un momento asi.

Sintiéndose cada vez más excitado ante la idea de ser Black cat y experimentar su creciente excitación de primera mano. Decidió actuar según sus deseos, acariciando su ahora forma femenina, Antonio llevo una de sus manos a su nueva amiga felina que se encontraba entre sus piernas, frotando su delicada manos a un ritmo.

Mientras frotaba y acariciaba su entre pierna, Antonio llevo la otra mano a sus perfectos y hermosos pechos, comenzando a acariciarse. Los gemidos que escapaban de sus labios se volvían cada cez mas sensuales. 

Cada toqué que sus dedos hacían, se volvían más poderoso que el anterior. Antonio jadeaba más y mas fuerte y arqueaba su espalda aún más en la dulce agonía que corría por su femenil cuerpo. El silencio que lo rodeaba sólo amplificaba los sonidos de su excitación;  gruñidos profundos puntuados por inhalaciones bruscas que reverberaban en las paredes vacías.

Los dedos de Antonio jugueteaban implacablemente con su clítoris hinchado, sintió que comenzaba a perder el control.  Sus caderas se sacudieron salvajemente contra la infantil sabana de Spider-Man mientras oleadas de placer chocaban contra el en creciente intensidad.  No recordaba haberse sentido nunca tan necesitado o desesperado.  Era casi doloroso cuánto deseaba esta liberación.

Con un empujón final, Antonio arqueó la espalda tanto que pudo sentir los tendones de su cuello sobresaliendo por la tensión cuando finalmente sucumbió al orgasmo.  Que recorrió su cuerpo como un rayo, dejándolo temblando y jadeando pesadamente en aquella infantil manta.
Lágrimas comenzaron a brotar por su rostro mientras yacía exhausto, recuperando el aliento después de un clímax tan intenso. Solo se limitó a decir. "La mejor puta compra de toda mi vida". Con una creciente sonrisa de satisfacción formándose en si nuebo rostro y ambas manos juzgando con sus senos.